Tarta camiseta de la selección española

Cuando la camara no quiere trabajar, no hay manera. Ha salido la foto rarísima, con unos brillos y una cosa abajo que no tiene nada que ver con la original, pero en fin, os haceís una idea, en la foto que está en vuelta se ve que no brilla, que es el efecto, creo de la luz. No le he echado nada, pero parece que le haya echado bronceador jajaja, en la vida real era mate.
No sé... porque se ve así. Necesito un curso de fotografía o comprarme una camara que me quiera una mijilla más.
Las tartas se ven afectadas por las modas y los acontecimientos. .
Así para un cumpleaños de este sábado me pidieron una tarta camiseta de la selección española.
Es una de las tartas más fáciles de hacer. Solo necesitamos un bizcocho rectangular.
Yo lo hice dos veces, para recortar las mangas de la camiseta y pegarlas. Como el bizcocho iba relleno de crema de chocolate, pegé las mangas también con esta crema.
Para conseguir este rojo, ya que la tarta era muy grande, necesité un bote entero de colorante rojo. Como os lo cuento. El rojo es una pesadilla, mira que intenté que fuera del Málaga, pero nada, en el último momento, de la selección española.



Ya estoy apunto de acariciar las vacaciones.
Creo que es lo mejor que tiene ser maestro tener dos meses de vacaciones en verano ( son dos , no tres como cree todo el mundo que nosotros seguimos hasta el último día de junio y empezamos el día uno en septiembre).
Iba a descansar casi todo el verano, pero ... tengo curso todas las semanas.
Personas que vienen incluso de otros países ( casi no me lo creo todavía esto eh, estoy entre alucinada y un poquillo más gorda, no por los helados).
Este verano me visitaran Marcelo y Fabricia, una pareja Italiana, que van a pasar sus vacaciones en Málaga y aprovecharan para hacer un curso en nuestro taller.
Y Cristina de Suiza, que también va a pasar sus vacaciones en Málaga y nos va a visitar.
Y así de cinco países más.
Creo que este blog, hoy más que nunca es una ventana al mundo.
Así que hoy te voy a dar la oportunidad de que decidas tú cual va a ser el próximo tutorial que quieres ver colgado.
Deja un comentario con lo que te gustaría aprender y lo que más sea solicitado, será lo que prepararé.



Esta semana ha sido muy entretenida en el cole.
Estamos preparando el baile de fin de curso. Madre mía que stress.
Os relato un ensayo.
Hacer la fila para ir al salón de actos. Toda una odisea. Algo nuevo, los pone nervioso. Se empujan. Uno le quita el coletero a una. Tú no bailas. Ah pues ya que no bailo, le quito la cola a la otra. Y me deja a todo el personal con el pelo al viento.
Yo recogiendo las gomillas del pelo e intentando hacer una fila. Pero una de las niñas del pelo suelto se siente tan anuncio de compresas que decide imitar a la de la casa la pradera y con la falda al vuelo bailar un ratillo. Yo me quedo mirandola, porque encima es que tiene arte y lo hace bien. Me relajo nada, quince segundos. Dos se han colado. Otros dos se sienten " colados" lo peor del mundo si tienes 3 años y vas en una fila al salón de actos.
Los cuatro primeros, al final.
Van mosqueados. Mosqueadísimos, así que se pelean entre ellos. Ha sido él primero , no ha sido él.
Y digo yo, si tardo normalmente 4 segundos en llegar porque llevo 15 minutos, y no he llegado.
LLegamos ¡ por fin¡ ahora hay que pasar por las sillas, sin que ninguno descubra lo divertido que es colarse entre ellas. Uy casi que lo consigo. Uno se da cuenta que si echas la silla para atrás el asiento cae y hace un ruido de escándalo.
Que contagioso es el aprendizaje, que todossssssssssss, quieren experimentar.
Cuatro ya se han colado entre las sillas. Tengo que decidir pronto que hacer. Si corro por los cuatro, el resto no estará cuando vuelva, fijo.
Decido llevar a los que me quedan y mirar a los otros con cara de " ahora verás cuando te coja",pero saben que nos les pasará absolutamente nada. La seño no pega, y que me regañe me da igual. Palabra textuales de uno que ya ha cumplido los cuatro ( que mayorrrr).
He subido a los demás al escenario, que está en alto.
No puedo bajar a por los otros, porque sino, alguno se me cae.
Nunca falla. El dulce chantaje.
Venga vamos a repartir caramelos, ah solo a los que están en el escenario. Si diera todos los caramelos que prometo, no me quedaría niño con diente.
Por fin todos juntos.
Anda, me he dejado el cassete abajo.
El que se mueva no baila.
Se levanta justo el que no quiere bailar,claro.
Mira que son listos los condenados.
Por fin pongo la música. Demasiado tarde. Descubren antes que suena si zapatean.
Y allí estaba yo, levantando las manos, dando una vuelta, las piernas hacia fuera pero sola como la una...porque todosssss todosssssss, estaban en su cuadro flamenco, que dicho sea de paso, era mucho más divertido.
Imposible. Quito la música. Uno se asoma, lo cojo por los pelos. Un segundo más y sin dientes.
Porque la altura es nada, unos centímetros, pero con el día que llevo..
Decido que se acabo el ensayo.
Vuelta atrás regreso a la clase. Pero con una seño despeiná, con cara de loca, desencajá, colocando a niños en una fila que solo veo yo. Porque para ellos no existe.
Llego a la clase y me preguntan:
"Seño ¿no ibamos a bailar?".
Me siento en el suelo, derrotá. Pensando si seré capaz de repetir esto todos los días esta semana.
Creo que no...total...los buenos bailarines, no necesitan tanto ensayo...