Muchas fotos de cursos.... Una historia de sonrisas y otras de lágrimas...

 Muchos me habeís regañado por que no he puesto las fotos de vuestros cursos en el blog. Pero son tantos cursos los que hacemos ya, y tan seguido... que no me da tiempo. Así que cuelgo de golpe los cuatro último cursos. Todo esto es posible gracias al boca a boca,que es la mejor publicidad. Hemos llegado a tener en estos cursos hasta 20 personas que se han quedado esperando en lista de espera.
Para que no vuelva a pasar, enero viene cargado de cursos por partida doble, estamos terminando de cuadrar el calendario, para poner los cursos de galletas y cake pops y ... ya hay cursos en febrero que están completos... Esto sin duda es lo mejor que le puede pasar a una escuela.

 Este grupo que veís en la foto, fue un curso más bueno, mas callaito, más apañao... nos visitaron como cada sábado de distintos puntos de España. Y las recetas y el buen humor corría por la mesa...

Hoy os voy a contar dos historias. Una es una historia familiar, muy divertida, y otra es la historia de una lectora de este blog que nos hizo llorar a lágrima viva...

Empiezo por la primera. Es la historia de Rafael, un hombre muy peculiar, que murió hace algunos años, pero que recuerdo siempre con una sonrisa en los labios. Porque era todo un personaje.

Rafael, era tío de mi madre, y aunque estaba un poco sordo en sus últimos días...siempre era un placer que te contará sus historias...

Un día me contó una que no he podido olvidar. Estaba esperando el autobus para ir a su pueblo, hace muchos, muchos años... Es de un pueblo de la provincia de Málaga que se llama Riogordo. Y una señora con bebé estaba esperando en la misma cola, cuando se dio cuenta que olvidó algo, y rápidamente le pidió a Rafael que cogiera al niño unos minutos, que iba al estanco un segundo. Pero pasó el segundo, el tercero y la mujer no volvió. Oscureció y decidió llevarse a casa ese niño, porque su madre no aparecía.

 Se encontró con que no sabía que hacer con ese bebé.Asi que se lo llevó a su casa. Cuando su mujer le vió aparecer con el bebé en brazo y la asombrosa historia, pues evidentemente no le creyó. Además, la fama de no ser muy fiel le había perseguido siempre, por lo que su pobre mujer ató cabos que realmente no estaban sueltos e imaginó que era su hijo, y que alguna alma en pena se lo había encasquetado.

Me contaba que se bloqueo, porque no tenía más argumentos de los que ya daba. Y en el cuartelillo, tampoco es que creyeran mucho su historia, asi que fue un lío tremendo. Hasta que por fin, todo se aclaró y  las autoridades pertiententes se hicieron cargo del bebé.

Esta familia tiene historias impresionantes. Otro día cuando salió a fanear al campo de madrugada, escuchó un griterío en casa... salió corriendo y se encontró a su mujer a escobazo limpio con un individuo, que lo que intento robar fue su personalidad, metiendose en la cama con su mujer, mientras esta dormía jajaja, menos mal que esta se dio cuenta,  y pudo sacarlo a tiempo. El individuo en vez de robar los chorizos, encontró en la cama algo más apetitoso... y quiso hacers pasar por un marido que cariñoso que  deja unos minutos el campo para atender sus obligaciones conyugales.

 Todas las fotos que veís en esta entrada,y en las demás que son de cursos, son personas que la mayoría de las veces no ha hecho una tarta en su vida. Empezan de cero  y en un solo dia se convierten en verdaderos profesionales.

Y ahora os voy a contar una historia de que viene de un pueblecito del sur.

Una historia digna del argumento de una pelicula.

He intercambiado muchas preguntas, y la protagonista, una señora muy mayor,  y su hija, maestra como yo, me han ido contando a trozos, la historia que he hilvanado de la siguiente manera.

Los protagonistas ,dos jovenes que en plena guerra civil se ven en bandos contrarios. Enamorados,  tienen que romper su compromiso porque el padre de uno apuñala al otro en una pelea.

No quiero ni imaginar lo que tiene que pasar por el cuerpo cuando tu padre, al que quieres mucho, le quita la vida al padre de la persona que más quieres en el mundo.

Y tu amor se quiebra por la mitad. Cada uno se va a vivir a una ciudad distinta. Pero el destino los vuelve a unir, casualmente a muchos kilometros de España, en un pueblecito Alemán, donde ambos ya han rehecho su vida y están casados y con hijos.

Se encuentran los trabajando en la misma fábrica. Ella teniendo como compañera a la mujer de él. Y el teniendo como compañero al marido de ella. Cuando comentaba esta historia con mi padre me decía que no era tan raro que hubiese pasado. Los dos eran del mismo pueblo. Los dos tenían familiares que emigraron en tiempos dificiles a Alemania, y los dos fueron animados y alentados por amigos o conocidos que ya estaban allí.

Cuando se encuentran por primera vez habían pasado 10 años de su roptura, pero el impacto lo tiró les hizo perder la voz a los dos de repente. Ninguno dijo nada. Hicieron como si no se conocieran. Sus familias, sus hijos, empezaron a relacionarse en el mismo colegio  y en el mismo círculo de amigos.

En cada paella, en cada acto social, evitaban mirarse y evitaban si quiera estar en la misma mesa.

 Pero los dos en lo más profundo de su alma, sabían que se amaban...

Una fría mañana de otoño, como cada mañana, salió a caminar después de dejar a los niños en el colegio.
Una bicicleta tropezó con ella y la tiró al suelo. Un brazo la levantó y le miró fijamente. Los dos se miraron. Se miraron llorando. Lloraron durante mucho rato. Sin ni siquiera  abrazarse. Solo se miraban y lloraban. Lloraban con toda la pena acomulada en sus corazones durante tantos y tantos años. Lloraron esta vez juntos...
Un ruido les devolvió a la realidad. Un amigo los apremiaba por llegar tarde al trabajo.
A partir de ese día fueron amantes. Sin tocarse. Sin rozarse. Buscaban a escondidas momentos de soledad, para mirarse. Para encontrarse el uno en los ojos del otro. Esto les bastaba para ser felices. Fue durante más de 30 años el motor de sus vidas. Se pasaron 30 años mirandose y queriéndose en silencio.
Disimulando en cada encuentro. Evitandose en cada reunión. Como todos los amigos comunes sabían lo acontecido en el pasado, no extrañaban este comportamiento. Todos sabían que uno había perdido a su padre en manos de otro...

 Mandé un correo preguntando lo que tú ahora mismo estas pensando. ¿Acabarían juntos?
La respuesta es no. Pero acabaron jubilados en el mismo pueblo. Donde los dos habían nacido.
Y ella enviudó. Y el enviudó. Él tenía 78 años y ella 80.   Y una mañana que fueron a pasear, se cogieron por fin de la mano.
Y me confesó que fue el momento más feliz de su vida... que siempre quiso a su marido, al padre de sus hijos. Pero aquella mañana...cuando el le cogió la mano....sientió que la vida merecía la pena con todas sus fuerzas.... Sintió que el amor era real. Que podía por fin tocarlo.

A los pocos meses de esto él murió, con la mano de ella entre las suyas.

Pero sonriendo.... y ella, lo echa de menos cada día... Ahora tiene 97 años. Y es capaz de escribirle un correo a una desconocida. Para contarle, esta preciosa historia.

Olé María Eugenia. Tus emails nos ha hecho darnos cuenta de muchas cosas. Y nos has enseñado que el amor es... una fuente de donde beber, no donde ahogarse....

 Muchísimas gracias por tus palabras, por enseñarme...que esta vida es muy corta y que las palabras que no se dicen, las palabras que no se regalan...se quedan flotando en el mundo de nadie, no vuelven.

Y gracias por tu esfuerzo por recostruir esos trozos de vida, e hilarlos entre lágrimas y recuerdos dulces para regalarnoslo...
En el último mail, tu hija me dijo que te habías arrepentido de no haber sido más fuerte y haber luchado por este amor.
A mí me parece que has sido fuerte, muy fuerte, para vivir con ello y no dañar a nadie.

Aquí debajo teneís una foto también con una historia muy bonita. Los chicos que veís al fondo, era su cumpleaños. Y su amigo le había comprado el curso sin que ella lo supiera. Estabamos esperandola con una tarta, y unas velas encendidas... le encantó su regalo...

 En nuestros cursos, además de conocer gente estupenda, nos desestrasamos. Porque la masa del fondant es para eso...

 Aprendemos a forrar, a cortar, a pegar y decorar una tarta....

 Además de reírnos muchísimo...

Aprovecho también esta entrada para desearos un feliz año neuvo y que os traigan vuestras Majestades una gran cantidad de regalos impresionante...

 En breve pondremos una entrada con todas las fechas y unas ideas de vasitos de degustación para nochevieja.

 Quiero dar las gracias a todas las personas que han pasado por esta escuela este año.

 Los que habeís venido de Granada, de Jaén, de Almería, de Córdoba, de Sevilla, de Huelva, de Cáceres, de Burgos, de Madrid,  de Murcia, de Barcelona, de León, de Valladolid.... y así muchísimos sitios más...

Es un honor que muchos de vosotros me hallaís llamado para decirme que habeís ganado premios en concursos de pastelería.

El otro día un periódico local vino a hacernos una entrevista y en ese momento llegó Sonia, una de nuestras alumnas, contentísima, porque había ganado un concurso de pastelería.

Yo creo que me puse más gorda de lo que ya estaba...jajaja.

 Cómo se lo pasaron estas niñas...que arte tienen y que bien trabajan....

 Algunas eran la primera vez que tocaban el fondant...y mira las cosas tan bonitas que hicieron...

 Estas fotos son de otro curso, el que hemos realizado hoy... unas niñas con unas manos...sino juzgad vosotros mismos...

 Mirad que muñecos más bonito...

 El modelado, que es la parte que más difícil, con la técnica, se hace la parte más sencilla...

Esta tarta es de Laura,  que después de venir a la tienda, muchas veces, descubrimos...que somos vecinas. Pero no de barrio, sino que vivimos en la misma urbanización y ninguna de las dos lo sabíamos...así paramos  en nuestras casas...

 Las galletas estos últimos días han sido muy navideñas...

Los colorantes líquidos han gustado mucho....

 Hoy había un grupo requetesalado. Muchas niñas sencillas y muy agradables...

 Alguna que otra, cuando vio lo que tenía modelar casi  le da algo, pero pero luego le salieron cosas preciosas¡¡¡

Aquí están rellenando y cubriendo el pastel antes de forrarlo.

Aquí están dando color a las mejillas de los ositos de azúcar...

 Los maquillamos con un colorete comestible, que hemos elaborado previamente...

 Aquí Barbara con su osito, más lindo... igual que ellla y su amiga Celeste...

Muchas gracias a todos por vuestro apoyo, vuestros comentarios y sobre todo muchas gracias por confiar en nosotras para realizar vuestros cursos.